Saltar al contenido

Novak Djokovic y yo. ¿Quién lo diría?

Hace poco compartía unos deliciosos vasos de agua con mi amigo el griego, y me comentaba de un artículo que había escrito en su blog sobre Novak Djokovic. 

 

Yo las neuronas espejo las tengo híper amplificadas de fábrica. Soy muy influenciable, especialmente cuando alguien tan inteligente y querido como mi amigo se apasiona con algo.

 

Este fue el caso y ahora estoy viviendo mi propio romance con Novak. 
(Con total aprobación de Mirko, que de tonto no tiene un pelo)

 

Y claro, ahora que con Novi nos conocemos más (bueno, yo a él, por ahora esta relación es mano única) me doy cuenta de que tenemos mucho en común.

 

Novac y yo. 

 

El tenis y el Tai Chi.

 

“Es un juego que te desafía constantemente en todos los niveles.

 

Tienes que pensar, pero al mismo tiempo no puedes pensar demasiado, tienes que encontrar ese balance perfecto, esa línea fina donde todo fluye automáticamente. Cuando estamos en esa zona, no pensamos, solo actuamos, solo somos, estamos ahí, en el momento presente.

 

Ese es todo el propósito de nuestra experiencia humana, estar presente.

 

Y una de las formas más efectivas de estar presentes es a travez de la respiración.

 

Entonces es así como yo intento recuperarme y volver a un estado óptimo de mente y cuerpo, a través de la respiracion conciente. Una, dos o tres o cinco o diez respiraciones, depende de cuánto tiempo tengo.

 

Así sea cerrardo mis ojos y solo sentirme a mí mismo y estar centrado.

 

Y hay diferentes técnicas, no hace falta ir a eso ahora, solo Respiración Consciente, es tan simple como eso.

 

Otra cosa que siento que me da mucha ayuda y que también se puede aplicar a cualquier cosa fuera del tenis y del deporte profesional, es tambien afirmaciones.

 

Porque cuando piensas en afirmaciones o pensamientos positivos, para las personas o para ti mismo, cuando comencé a hacer eso, a decirme a mí mismo “eres bueno” “estas en el estado mental correcto”, se trata de cambiar la frecuencia eléctrica de tu cerebro repitiendo las cosas positivas. Y no solo repitiéndolas: sintiéndolas.

 

Hasta que nos las empiezas a sentir, no estás haciendo un buen trabajo.   

 

Realmente no entendía lo que eso significaba así que empecé, cuando la multitud estaba cantando el nombre de mi oponente, a escuchar mi propio nombre.

 

Realmente me he entrenado a mí mismo hasta el punto en que verdaderamente estoy sintiendo eso. 

 

No solo me lo estoy diciendo, lo estoy sintiendo. 

 

Pero tengo que entrenarlo TODO el tiempo.

 

Así que cada vez que salgo a la cancha, miro el cielo, expreso mi gratitud por estar ahí.

 

Entro y toco la cancha (hace un gesto dando un golpecito con la mano) y hago esa conexión con mi corazón y siento que soy UNO con la cancha.

 

Imagino esa inmensa energía del espacio que conecta los cielos y la cancha

 

Y sé que esto puede sonar muy… no sé…  místico o algo así… pero esto es lo realmente hago y siento.

 

Novak Djokovic

 

 

Que pases un buen domingo.

 

Abrazo de árbol
Mariana