Desde hace un tiempo estoy dando clases en Centros De Mayores.
¿Por el dinero? No.
Porque pagan tan poco que en mi cabeza es casi como un voluntariado.
Pero, al igual que con la clase de los domingos, el trato es muy muy bueno para mí.
Me conviene y mucho
Lo que sucede allí, la gente que conozco, lo que hacemos, lo que me llevo, bien vale la pena.
En esta época donde lo único que se elabora son “brunchs” acompañados de cafés con nombres gringos (guiris) o posteos de Instagram, promover la practica del Tai Chi es mi forma de equilibrar.
Cada quien con su vida decide que batallas dar.
Bueno, yo elijo esta.
Promuevo el Tai Chi.
Promuevo la cocina a fuego lento.
Estar 20 minutos para poder sumergirnos en un movimiento.
Aumentar nuestra vitalidad desde la expansión lenta
Integrar respiracion, acción e intención en una especie de danza.
Son territorios ganados a la época de la inmediatez.
Una mujer de Filipinas que casi no puede hablar empieza a sacar el sonido por su boca. En su primera clase.
Otra que tiene grandes problemas de audición, escuchó mejor que nunca.
En su primera clase.
¿Fue magia?
No
¿Es que yo soy buenísima dando clases?
Tampoco (aunque lo soy, pero no es eso)
Es lo profundo del Tai Chi.
No sólo por lo técnico. Que hay que estudiar y comprender, no andar por ahí haciendo papelones.
No sólo porque yo tengo el privilegio de ser alumna de un Sifu que es un verdadero maestro, valioso y auténtico.
Es el Tai Chi
Es cambiar la tensión de la contracción
Por la tensión de la expansión
Es cambiar un puño cerrado por el vuelo de una grulla.
Es como pasar de Off a On
Y cuando se comprende ese punto, el inicial…
Ah!!!!!!!
Es encontrar, por fin, la punta del ovillo y no perder el hilo.
Y darte cuenta que realmente estás avanzando porque cambio tu cuerpo, tu rigidez fisica y mental, porque te dicen, y lo sientes, que te ven más esbelta, más tranquila. Más sonriente.
Con más foco.
Entonces…
Si no vienes a mis clases de Adultos Mayores en el barrio de Chueca
Ni a mis Happy Hour los domingos la mañana en la “República” de Quintana (parque El Calero)
Pero quieres saborear esto de lo que hablo.
Y aun no te animas a pedirme clases individuales.
Hay solo una cosa que podés hacer.
MAÑANAS PODEROSAS.
Es una secuencia online
Corta y clara.
Y poderosa.
Te va a poner la punta del ovillo entre tus dedos.
Ahora cuesta 49 euros.
En una semana aumenta.
(Hay precios en pesos para mis queridos de argentina)
¿Es una buena idea comprarla?
Depende.
Si haces tu parte, sí.
Si no, no.
Por esto del equilibrio.
Yo al mía la hice y está aquí.
MAÑANAS PODEROSAS.
Es apta todo público
Es un buen comienzo.
Abrazo de árbol
Mariana